miércoles, 21 de marzo de 2012

Crónicas del recuerdo

Crónicas del recuerdo 


El decidió ser eterno, 
juega con mis sentidos 
y se divierte morando 
en aquel lugar místico 
que construimos una 
madrugada de domingo 
cuando dormíamos 
en su viejo sofá 
con manchas de wiskie 
en los cojines, 

el decidió convertirse 
en mi recuerdo,
y presentarse cada que le de 
la regalada gana,

aun desaparece por meses
y un día regresa y se sienta a ver
su televisor de 52 pulgadas 
con una heinekey helada en la mano
Y balbucea maldiciones.

El decidió morar en el pasado
con sus viejos jeans rotos y decolorados
bebiendo cerveza, 
con ella la que lleva su apellido
y las bragas negras que olvide
antes de marcharme 
un lunes por la mañana.