viernes, 26 de junio de 2009

Good Bye 2007


Con que me quedaría del año, el principio no, aunque dicen que si se tiene un buen comienzo se tendrá un buen final, en este caso fue lo contrario, el año empezó como cualquier otro, nada fuera de lo común, nada sobresaliente, nada bueno, ni tampoco malo, o quizá demasiado alcohol hizo que perdiera un poco la perspectiva de las cosas, a mediados de año, ya llevaba una larga carrera recorrida, conocía todo los bares de Ciudad Neza, entre más cerveza, cigarrillos, bares, salida con las muchachas, noches de chicas, ufff!!!... las noches de chicas, … pero…. no, no me quedaría con eso, ni tampoco con mi primer orgasmo del año, me quedaría con el final, con el mes de Diciembre, a decir verdad, me quedaría con una sola conversación por el MSN.

-si te dijera que estoy enamorado perdidamente de vos, me darías una oportunidad o mejor dicho, crees que soy tu tipo?
-ahí van dos eh?

Si, con ese día, con esas horas o minutos que pase en un juego de palabras me quedaría. ¿Quién dice que no crecen frambuesas en invierno?... Y al final de los puntos suspensivos que marcan una última etapa de un año que ha estado lleno de nada y vacío de todo, comienza uno nuevo con la palabra más famosa del mundo “amor”, esa que unos tienen en peregrinación hace ya algunos años y otras, como yo, la comienzan con el amanecer, el primer amanecer de Enero, a ratos recordaré este diciembre, que me ha regalado una caja con sueños y una sonrisa inocente que se había perdido y ahora regresa en un juego de preguntas y no piensa marcharse. Respiro otro ambiente a mi alrededor que huele a miel y caramelos.

Solía imaginarme como sería cuando cumpliera veintitrés y la realidad se ha hecho suspicaz en el armario de mi mente, nunca me imagine tal y como surgió que se fue haciendo cada vez mas clara la película, volvieron las historias de princesa y los finales felices a invadir mi mente, esos sueños que fueron arrastrados a la basura y no me dejaron mas que besos de mentiras. Observo historias arañadas en los ojos de las personas que están sentadas a mi alrededor, me gustaría convencerlos que aun existe vivieron felices para cada uno sin que les parezca mentira. Ahora, me queda un viaje infinito en que tengo que confirmar que la felicidad no es una falacia, como cuando me preguntas como estas y yo te digo que mejor no se puede estar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario